Cada día más empresas deciden trasladar sus cadenas de suministro a territorios próximos a sus mercados finales, considerando factores como la guerra comercial entre Estados Unidos y China, además del alza en los costos de transporte, lo cual hace menos rentable tener sus procesos productivos en Asia Pacífico. A su vez, el cambio en los hábitos de consumo post pandemia disparó la demanda de bienes de consumo electrónicos, lo que se ha convertido en un importante desafío para ese sector. En medio de este escenario, América Latina se encuentra con una oportunidad única de desarrollo económico a través del Nearshoring, en donde la integración de las cadenas de suministro y la digitalización de los procesos se convierten en pilares para la operación.
Durante la década de los ochenta y mediados de los noventa el modelo de economía a gran escala fomentó en las transnacionales la deslocalización de cadenas productivas – u Offshoring-, lo que implicó que muchas de estas trasladaran sus plantas al continente asiático. Este proceso fue motivado, principalmente, por el bajo costo de la mano de obra y las garantías de poder acceder a mercados tan populosos como India, China, entre otros, recortando así sus costos operativos y maximizando las ganancias.
Sin embargo, el fuerte impulso económico que este modelo generó en los mercados de Asia hizo cada vez menos rentable para las empresas mantener sus labores productivas deslocalizadas. Esto, según la Comisión Económica para Latinoamérica y el Caribe (CEPAL), se debe a factores como el crecimiento de la economía en Asia Pacífico, el aumento del salario y la consiguiente alza del poder adquisitivo de los países subdesarrollados, la automatización de los procesos productivos, el aumento en los costos de transporte, el precio del petróleo, la guerra comercial entre Estados Unidos y China, además de los cambios en los hábitos de consumo y la revolución informática.
En este escenario muchas empresas tomaron la determinación de bajar su nivel de dependencia operacional con oriente, ya sea agregando nuevos centros de fabricación en distintos puntos del mundo o desplazando los procesos de ensamblaje a ubicaciones más cercanas a los mercados de destino. Práctica que se conoce como Nearshoring.
El modelo de Nearshoring ha tomado gran impulso en los últimos cinco años, pero la reciente crisis sanitaria generada por el COVID-19 aceleró esta transición, llevando a muchas empresas a acercar sus líneas de producción para enfrentar los altos costos de transporte hacia regiones como Latinoamérica, y también para minimizar el impacto que puedan tener en los mercados locales posibles interrupciones en las cadenas de suministro.
Este cambio de modelo está facilitando la inversión de capitales extranjeros en las economías latinoamericanas, siendo México, Brasil, Argentina, Chile, Costa Rica y Colombia los países de la región que concentran la mayor parte de la inversión extranjera. La ubicación geográfica estratégica cercana a Norteamérica, el gran potencial de producción de energía, la gran variedad de recursos naturales y mano de obra cada vez más especializada hacen de América Latina una región que se verá muy beneficiada de las ventajas del Nearshoring, tanto para su desarrollo económico como en su capacidad de satisfacer la creciente demanda interna.
Cambios en la demanda y los hábitos de consumo
En estos primeros seis meses de 2021 el cambio en los hábitos de consumo de productos de electrónica está generando un importante aumento en la demanda de estos bienes en toda Latinoamérica. Esto se puede explicar, en gran medida, por el boom del E-Commerce y la omnicanalidad que ha fomentado el desarrollo del comercio minorista. En este sentido el Nearshoring permite a las empresas de la región responder de forma más ágil a la creciente demanda y hacer frente a los desafíos que el aumento de volumen de importaciones está generando en los principales puertos de Latinoamérica.
El alza en la demanda de electrodomésticos ha beneficiado a todos los países productores de la región. Entre ellos, México, que destaca por ser el principal mercado de fabricación de productos de consumo tecnológicos en Latinoamérica. Su industria va desde el diseño y fabricación de componentes, el sub-ensamblaje, hasta la manufactura de productos finales en rubros como la telefonía, computadoras, y electrodomésticos, por nombrar algunos.
Desde 2019, México se ha posicionado como el mayor socio comercial de Estados Unidos, intercambiando 614 mil millones de dólares y siendo el primer destino de Nearshoring para las transnacionales norteamericanas de computación, electrodomésticos y electrónica de consumo. Su cercanía con Estados Unidos le permite reducir los tiempos de entrega de sus productos a los consumidores y, además, simplifica la personalización de estos para nuestra región.
Con un panorama mundial que favorece el Nearshoring hacia Latinoamérica, queda terreno por avanzar, ya que la producción en la región aún se limita solo al montaje final y con cadenas de suministro simplificadas, por lo que invertir en tecnología y especialización de la mano de obra es fundamental.
avanzar en la confiabilidad de las cadenas de suministro, ya que es fundamental que estas tengan visibilidad y capacidad de control. También avanzar hacia la automatización de los centros de distribución y estimular la especialización y el desarrollo de infraestructura digital para poder agregar más valor a las cadenas de suministro.
Hacia una logística integrada
En el mediano plazo, el Nearshoring será para América Latina un importante polo de desarrollo de las economías locales, mejorando el acceso a la oferta, abaratando costos de productos electrónicos y permitiendo la especialización de la mano de obra.
Pero este modelo también añade nuevos desafíos para la región, ya que como los proveedores están más alejados de los puntos de ensamblaje, una logística integrada se torna fundamental para tener visibilidad de la operación y tener la capacidad de adaptarse ante cualquier eventualidad; además de mantener las mercancías siempre en movimiento y reducir los tiempos de almacenaje al mínimo.
Una logística integrada implica gestionar eficientemente las relaciones con todos los actores involucrados en la cadena de suministros: transporte, almacenaje, control de inventarios y trazabilidad. En ese sentido Maersk ofrece soluciones integrales para la industria de la tecnología y electrónica, entendiendo los desafíos y necesidades de cada sector de la industria, entregando soluciones ajustadas que dan visibilidad, consistencia y optimización constante en el flujo de productos, con información inmediata y gestión de la documentación a lo largo de toda la cadena.
Un ejemplo de esto son las soluciones de Supply Chain Management (SCM) de Maersk, una plataforma tecnológica que combina la gestión de datos, de stakeholders y de envíos para adaptar sus servicios según las necesidades de la industria tecnológica.
La plataforma permite optimizar los inventarios, automatizar procesos de compra y pago con proveedores, gestionar la documentación en tiempo real, y ajustar el flujo de la carga proyectando anticipadamente cambios en la demanda. Todo a través del intercambio electrónico de datos (EDI) que agiliza y automatiza los procesos.
Un equipo humano superior a 5 mil personas en 158 puntos estratégicos ayuda a la gestión de todos los actores de la cadena de suministros como proveedores, intermediarios y líneas de producción relocalizadas. Todo esto con la capacidad de reconocer cualquier dificultad y planificar soluciones que rentabilizan la logística.
Como operador logístico líder de la región, Maersk cuenta con una infraestructura de más de 300 mil metros cuadrados de bodegas y almacenaje en toda América Latina, que junto a una extensa red de servicios y soluciones de transporte marítimo, aéreo y terrestre simplifican y dan flexibilidad a las cadenas de suministro de la industria de tecnología y electrónica, adecuándose y adaptándose a los nuevos desafíos que el Nearshoring traiga consigo.
Para conocer más sobre cómo Maersk puede ayudarte a integrar la logística de tu negocio ponte en contacto con nuestros expertos.
Anything you need, we’re here to help
Al enviar este formulario, acepto recibir noticias relacionadas con la logística, y actualizaciones de marketing de A. P. Moller-Maersk y sus filiales, por correo electrónico. Entiendo que puedo optar por no recibir dichas comunicaciones de Maersk en cualquier momento, haciendo clic en el enlace de cancelación de suscripción. Para ver cómo procesamos tus datos personales, consulta nuestra Política de privacidad.